Hanukkah tiene muchos significados profundos, paso para su reflexión cuatro conocimientos recientes que iluminan nuestro mundo cada vez más oscuro.
En un mundo lleno de confusión, ansiedad y odio, Hanukkah nos da un regalo de luz. Aquí hay cuatro ideas recientes sobre el significado de la menorá, el velero. Su luz nos susurra que nos acerquemos y escuchemos su maravilloso mensaje.
1. Busque el fuego interior, basta una vela pequeña para quitar la oscuridad:
Todos hemos experimentado una sensación de fatiga, cuando una pequeña voz en nuestra mente nos dice: basta, ríndete. Puede ser un sueño que hemos soñado toda la vida, un deseo de hacer algo grande, ser mejores personas o vivir mejor. Quizás tengamos una persona en nuestras vidas que esté enfrentando dificultades.
Es mucho más fácil levantarse e irse que continuar nuestro viaje y buscar la grandeza.
El milagro de Hanukkah enseña que nunca dejaremos de esforzarnos y que debemos continuar buscando el mismo fuego interior. Y como nos enseñan desde niños, en las canciones de Hanukkah, “Vinimos a desterrar la oscuridad, Tenemos luz y fuego” No dejes de explorar y encontrar el alma y la llama en los demás. Puede ser un desafío, pero no renuncies a tus sueños ni a las personas en las que crees. Busque el milagro y tendrá éxito.
2. Continuar creciendo:
Cada noche de Hanukkah se agrega una vela, primero encendemos la nueva vela de izquierda a derecha y cada noche agregamos una nueva vela, hasta que el último día se enciende toda la menorá. Los números están creciendo. El aumento en el número de velas ilustra la grandeza del milagro que se hizo más fuerte cada día.
En el judaísmo, en un nivel más profundo, el aceite representa la sabiduría del corazón y la mente. Los griegos profanaron no solo el aceite sagrado, sino también los corazones y las mentes de nuestro pueblo. El pueblo judío comenzó a creer que la sabiduría griega era la verdadera y la única sabiduría. Sin embargo, quedo un jarrón con aceite puro, un remanente de verdad, una chispa de eterna santidad divina que nunca ha desaparecido. Con esta pequeña luz pudimos volver a la grandeza.
No hemos perdido el alma del pueblo, pero lo estamos perdiendo hoy. Ser humano significa seguir creciendo, seguir aprendiendo, seguir luchando por la corrección del mundo. Lástima es simplemente “fluir”, ser la misma persona que éramos hace 5 o 10 años, sin evolucionar y cambiar.
La menorá nos pide que continuemos desafiando nuestra mente y corazón constantemente. Agrega luz a tu vida todos los días. Nutre tu alma para que prosperes como seres humanos. Eran más grandes.
3. Enciende la llama de tus hijos:
Cuando encendemos la menorá, debemos sostener vela cerca de la mecha hasta que se encienda y continúe ardiendo por sí solo. Ésta es la tarea de todo padre, de todo adulto que tenga hijos en su vida y de todos los maestros que tienen aprendices bajo su cargo.
La menorá nos pide que continuemos encendiendo la luz hasta que el niño sea capaz de encender el fuego dentro de su alma y ser una persona orgullosa. Sigue extendiéndote. No se desesperen. Cada niño es importante. Cada persona es importante. Como el agua que fluye sobre las rocas hasta que pueden penetrar, también afectará a sus hijos.
La palabra Hanukkah recuerda a la palabra educación. La esencia de la educación es transmitir el conocimiento a la próxima generación. El conocimiento no es un tema, el conocimiento es una forma de vida. Crea una casa llena de luz todas las semanas. Bendice a tus hijos. Habla amablemente. Lleva la alegría a casa.
Permita que sus hijos vean su amor por la gente y el país. Enseñe a sus hijos a dar a la caridad. Adopta la gratitud. Invierta en una relación con Dios en su vida. Demuestre lo que significa estar comprometido con la verdad. Vive apasionadamente por todo en lo que crees. Sigue encendiendo el fuego.
Esto es un trabajo duro, sin embargo, cuanto más tiempo mantenga la llama cerca de la mecha, más grande y estable será su llama.
4. Sigue esperando, sigue creando, sigue haciendo:
Los judíos fueron perseguidos, mal entendidos y discriminados.
El hecho de que los judíos no renunciaran a encender la luz es un mensaje asombroso para todos nosotros. Para los judíos estaba claro que no había suficiente aceite para mañana. Pero, se negaron a perder la esperanza en relación al mañana. Es esta esperanza la que permite que nuestro pueblo sobreviva. Si las generaciones pasadas hubieran tenido una forma de predecir el futuro del pueblo judío, habrían gritado de desesperación y dolor.
Esto es lo que vemos: la destrucción del templo en Jerusalén, nos llevaron encadenados al exilio, nos vendieron como esclavos. Inquisición. Fuimos llevados a la hoguera debido a nuestra fe. Pogromos. Cruzadas. Fuimos apiñados en vagones de ganado y arrojados a crematorios.
Estamos rodeados de enemigos que amenazan con arrojarnos al mar y borrar al Estado de Israel de la faz de la tierra. Ataques terroristas. Túneles llenos de armas mortales. Las mentiras de la organización BDS (Movimiento de Boicot, desinversión y sanciones). Ataques antisemitas en Europa y EE.UU.
El odio lleno de veneno asoma su fea cabeza en los campus universitarios e incluso asesinatos en las sinagogas y mezquitas, tanta maldad en el nombre de la religión. ¿Es posible que el pueblo de Israel y demás almas libres todavía se mantengan firmes en la fe de nuestros antepasados y siguen prendiendo la luz en todo el mundo?
¡Sí!
Nunca hemos perdido nuestro deseo de sobrevivir y mantener la luz prendida.
Nos aferramos a nuestras esperanzas y creencias de que el pueblo de Israel y demás almas puras sigan vivos.
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